El Tottenham selló ayer en Wembley su clasificación para los octavos de la Champions League como primero de grupo e invicto, contando todos sus aprtidos en Wembley por victorias contundentes. Tanto Borussia como Real Madrid como Apoel han sucumbido al poderío del equipo del norte de Londres que se ha mostrado por fin sólido en la máxima competición tras el fracaso estrepitoso del año pasado en fase de grupos, donde no obtuvo billete para los octavos en un grupo que compartía con Bayern Leverkusen y Mónaco.
Pero todo este poderío mostrado en la Champions, choca frente a la vulnerabilidad que está mostrando en Premier League, donde cada partido en Wembley es prácticamente un suplicio para el equipo de Pochettino. Tanto es así, que tras el empate firmado ante el Wattford en esta última jornada se han despedido prácticamente de la lucha por la Premier y ven cómo se complica seriamente entrar entre los cuatro primeros, que dan acceso a disputar la Champions del año que viene. Los dos equipos de Manchester tienen ya una ventaja sideral respeto al resto de equipos y sólo el Chelsea aguanta un poco en la lejanía a ambos equipos.
Lo peligroso de esto para el Tottenham es que cuentan en sus filas con dos de los jugadores más cotizados del mercado, y que Harry Kane o Dele Alli no jueguen el año que viene la Champions con el Tottenham hará que busquen una salida, ya que novias no les van a faltar. Se habla de un fuerte interés del Madrid y Barcelona por ambos y con el escaparate del Mundial incluido será muy defícil para Levy retener a sus figuras si no participa en la Champions el año que viene. Además de que estrenan el nuevo White Hart Lane y la construción del nuevo estadio les ha mermado económicamente.