Alemania ha vuelto a ser la mejor selección en la ronda de clasificación, ha hecho la mejor clasificación de su historia con diez victorias de diez posibles, y lo ha hecho convocando ghasta a 37 jugadores diferentes a lo largo de la fase. Una auténtica barbaridad que hará que la lista definitiva para Rusia en la que sólo caben 23 sea una criba durísima para el ya eterno seleccionador alemán. Cuenta además con la selección sub 19 y la sub 21 campeonas el pasado verano, por lo que se suman más nombres y más competencia a los ya mencionados.
Además de ser el vigente campeón del mundo, Alemania siempre muestra una fiabilidad pasmosa en las citas internacionales. Rara vez no llega a las semifinales del torneo al que acude, y siempre es uno de los favoritos, año tras año y torneo tras torneo. No en vano ha ganado cuatro mundiales y otras tres Eurocopas. Además lleva varios años con una política continuista muy interesante que la hace gozar de una gran plantilla jóven y sobre todo con gran experiencia internacional ya.
La manschafft es ya junto a Brasil la máxima candidata al torneo a día de hoy. Sus recursos son ilimitados, y quizás el único punto negro es la figura de un nueve de garantías. Gnabry (campeón sub 21 el pasado verano) apunta grandes maneras pero ahora mismo su convocatoria parece una quimera. Werner es el que parte con más papeletas, aunque Thomas Müller, que puede convertirse en el máximo goleador histórico de los mundiales desbancando a su compatriota Klose, siempre rinde a las mil maravillas con la selección. Löw tendrá que decidir y si hay suerte podrá contar con la vuelta de un Reus al que el destino y Alemania le deben una.