Tras eliminar a los San Antonio Spurs y ganar el primer partido frente los Warriors de Curry, sólo queda tomar en serio la candidatura de Oklahoma City Thunder al anillo. Y si son candidatos es en parte gracias a su entrenador Billy Donovan, que ha ido a contracorriente del baloncesto actual y juega con dos hombres altos y en muchos casos con dos cincos en pista para contrarrestar el small ball que predomina en el baloncesto actualmente.
Clave es para Donovan la figura de un Steven Adams que está siendo clave en el devenir en los playoffs de estos Thunder que están desatados. El Neozelandés aporta esa defensa interior y protección del aro tan necesaria para las salidas fulgurantes al contraataque de Durant y Westbrook. Todo coordinado en la pizarra de un Donovan que está sorprendiendo a todos tras un inicio poco prometedor de la temporada. Parece que al igual que hizo con la universidad de Florida Donovan viene con ganas de llevarse el título, y casi siemre acaba bien para él.