Si a principio de los playoffs nos llegan a decir que los Thunder iban a ir 2-1 en las finales del Oeste frente a los Warriors, que el tercer partido les iban a ganar de veinte puntos y que antes habían eliminad a los Spurs con contundente 4-2 nos hubiesen llamado locos. Pero los Oklahoma están dando su mejor versión cuando hay que darla, en los playoffs y en los momentos clave, Durant y Westbrook están finísimos y parecen imparables en ataque, y el fenómeno defensivo Steven Adams les aporta esa energía que tanto les faltaba a los Thunder para llegar al primer escalafón competitivo.
Eso y que en su estadio el Chesapeake Arena están intratables. Allí se forjó la victoria en la serie ante los Spurs y de ganar esta noche su partido tendrán más de media serie en el bolsillo. Ahora mismo son dueños de la serie con el factor cancha a favor y llegan tras la paliza de hace dos noches. Si son capaces de controlar las emociones y Durant y Westbrook continúan a su nivel tienen posibilidades de dejar fuera al gran favorito al título algo impensable hace algunos meses y que además esta coronando a Donovan como un gran estratega de los banquillos y que de llevarse el título los Thunder podría provocar la renovación de un Durant que dudaba y mucho de este proyecto, pero que tras esta postemporada puede cambiar seriamente de idea. Y todo pasa por convertir el Chesapeake en un fortín empezando por esta noche.