El partido de esta noche es una prueba de fuego para este Madrid que afronta además el partido con Ronaldo, Benzema y Carvajal tocados. Tres piezas fundamentales para un equipo cosido con alfileres que como le falle lo más mínimo se viene abajo con facilidad como ocurrió en Wolfsburgo. Eso es algo que sabe el City y querrá aprovecharlo sabedor de la dificultad de la vuelta en el Bernabéu.
Además Pellegrini reservó a sus jugadores fundamentales como De Bruyne, que desde su vuelta este City parece otro, además de recuperar para la causa a Kompany, líder de una defensa necesitada de jugadores contundentes, y Sterling un auténtico puñal que todavía no ha demostrado valer la millonada que se pagó por él en verano. Como contraposición perdieron por lesión a su mejor medio centro Yaya Touré, aunque Pellegrini llevaba varias semanas ya mandándole al banquillo, por lo que en principio no trastoca del todo los planes del chileno.
El físico del equipo inglés será una prueba de fuego para ver el estado de la lesión de un Cristiano que cuando ha estado tocado su equipo se ha resentido y la falta de gol de su estrella en algún partido importante le ha costado más de un disgusto al Madrid, sabedor de la dependencia que tiene de su estrella para marcar.