Si hay un equipo que se está asegurando un gran presente pero sobre todo un futuro prometedor, ese es el Borussia Dortmund, el equipo teutón siempre ha destacado por sacar talento joven y gran rendimiento de jugadores desconocidos, pero en este caso han armado un núcleo joven que promete ser de lo mejor de Europa en pocos años. A la irrupción y consagración de Weigl ya como titular hay que añadir la última adquisición, la perla sueca Isak, que ha preferido jugar en el Dortmund por el compromiso que tienen de juego con los jóvenes, cosa que no e ofrecieron en el Real Madrid (club al que se le vinculó fuertemente la semana pasada).
Pero a parte del nuevo Ibra, como se conoce en Suecia a Isak, el Dortmund cuenta con varias perlas que poco a poco van asomando al equipo titular y que prometen dar muchas alegrías a las gradas del Signal Iduna Park. Se trata de Dembélé, Pulisic y mi gran debilidad Emre Mor, el turco nacido en Dinamarca es un fuera de serie y que se convirtió en la pasada Eurocopa en el futbolista otomano más jóven en debutar en este torneo internacional con apenas 18 años.
Pero todo este talento no podría funcionar sin un entrenador que confíe en ellos, que no le tiemble la mano a la hora de darles responsabilidad en momentos cruciales y en este caso Tüchel es el hombre adecuado, siguiendo la estela y filosofía de Klopp está sacando otra gran camada de jugadores que pronto serán de lo más temido en la Bundesliga y en la Champions, ahora sólo falta que sigan la proyección como se espera y que el Borussia sepa retener a estas perlas para volver a verle en lo más alto de los torneos europeos, y no tiene pinta de que estos jóvenes quieran esperar mucho para ello.