Jürgen Klopp está vivendo momentos difíciles en el Liverpool. Tras una pretemporada esperanzadora y un inicio de Premier muy bueno, el partido ante el Manchester City le hizo mucho daño. Fue un partido muy parejo hasta la fatídica expulsión de Sané que decantó el partido para los de Guardiola que les terminaron haciendo una manita. Pero a partir de ahí los resultados han sido muy malos. No ha pasado del empate en ninguno de los partidos de la Champions League, y sólo ha sido capaz de ganar al Leicester desde entonces, alejándose de manera muy rápida de los cabezas de la clasificación.
Este sábado además tiene un importantísimo partido ante el Manchester United, en el clásico inglés, y junto a la mala trayectoria del equipo se le ha unido una pésima noticia. Sadhio Mané es baja para el partido y habrá que ver cuánto tiempo estará fuera de los terrenos de juego (se habla de 6 semanas) ya que estaba siendo el jugador más en forma del equipo. Así reciben a un United invicto y eufórico tras verse líder en la tabla, empatado con el City, y todavía invicto y con un Lukaku en estado de gracia.
Lo único bueno de este periodo ha sido la recuperación de la mejor forma de un Coutinho que había vuelto muy flojo tras su frustado fichaje por el Barcelona. Es lo único a lo que se aferra la afición de Anfield que el año pasado no perdió un solo partido ante los seis primeros y que este año ya ha ganado uno y perdido otro. Y qué mejor partido para cambiar la tendencia del equipo que el clásico inglés.