A estas horas se está jugando en Melbourne el primer partido de Jorge Sampaoli como seleccionador argentino. No es todavía partido oficial, pero es un partido ante Brasil por lo que la importancia al tratarse del clásico del sur de América es máxima. Su primer once está lleno de intenciones y deja ver que de funcionar Argentina será de nuevo un rival peligrosísimo con mucha dinamita arriba y una gran solidez atrás.
Su primer once junta a Messi, Dybala, Di María e Higuaín, pura dinamita arriba con muchísima movilidad y sobre todo gol, algo de lo que lleva adoleciendo la albiceleste desde hace mucho tiempo, combiandos con una defensa de cinco con tres centrales que tan buen éxito dio al técnico en el Sevilla. Los mandos del equipo estarán para Biglia que aportará la lucha y Banega que aportará la clase y servirá de balones a los cuatro atacantes.
Es una gran apuesta y puede sacar la mejor versión de Messi con Argentina por fin, y volver a encauzar al equipo en la clasificación para el Mundial de Rusia donde hasta ahora llevan un papel más que discreto. Comienza la era Sampaoli en Argentina con mucha ilusión y sobre todo con gran expectación ya que puede por fin volver a verse una gran versión de Argentina y de Messi que es el objetivo principal del nuevo técnico albiceleste.