Javier Tebas, presidente de La Liga ha vuelto a hacer gala de su fama y ha vuelto a contradecirse a sí mismo con el único objetivo de sacar mayor dinero para su beneficio. Desde el principio aseguró a todos los clubes de que todos los partidos se iban a jugar a puerta cerrada y sin público, y pese a la confirmación por parte del gobierno que iba a ser así, el mismo día le contradecía alegando la posibilidad de entrada de público sólo en algunas comunidades que estuviesen más avanzadas de fase.
Pero no sólo se queda ahí la cosa, para gestionar un calendario tan apretado garantizó a los equipos unos mínimos de descanso que en las cuatro primeras jornadas de Liga no se respetan. El Athletic o el Atlético son los más perjudicados con 10 partidos en 4 días, algo que les deja en total desventaja competitiva y que hace que ya la competición empiece a adulterarse. Aún así los horarios vuelven a ser favorables para que se pueda ver el fútbol en todos los países extranjeros que le reportan a la Liga dinero sin tener en cuenta a las aficiones locales.
Con tofo esto Tebas vuelve a mostrar su egoísmo, que no piensa en quien de verdad le está dando de comer que son los jugadores, y además demuestra lo rencoroso que es contra clubes que no le apoyan en su candidatura de seguir al frente de la presidencia de La Liga como son el Atlético o el Real Madrid, al que tras garantizarle que no iba a haber público en lo que quedaba de campeonato aprovechó como Levante y Mallorca para realizar obras en su estadio y que tendrán que estar atentos en caso de aprobarse la entrada de público para cancelar parte de las obras y volver a adecentar el estadio.