El Real Madrid se ha proclamado campeón de liga por trigésimo sexta vez en su historia, y lo ha hecho con unos números apabullantes que no dejan lugar a duda. De las 34 jornadas disputadas, tan solo una derrota y seis empates, números incontestables que dejan claro la mano de hierro a la que ha sometido a todos sus rivales, salvo al Atlético, que le ha ocasionado la única derrota del curso y en el Bernabéu tampoco fue capaz de ganarle. Por si estos números no fueran suficientes, es el equipo más goleador y el menos goleado, lo que habla de un balance perfecto que le hace casi imposible de vencer este curso.
Ha ganado además los cuatro partidos a sus rivales directos de este año, tanto a Girona como a Barcelona, y desde que se aupó al liderato tras ganar en Montilivi, no ha vuelto a soltar el primer puesto. Y eso que a principio de temporada, la falta de un nueve puro de garantías hacía que hubiese dudas de cara al gol en este equipo, pero la irrupción goleadora del fichaje estrella del verano Jude Bellingham, especialmente los primeros seis meses, ha mitigado el problema dejándolo en anecdótico.
Pero no solo eso, sino que el equipo se ha repuesto a encontrarse en la jornada uno del campeonato, con la lesión de gravedad de Courtois y Militao, y más tarde sería Alaba el que los acompañaría en la enfermería por el dichoso cruzado, lo que hace que tenga incluso más mérito este título. Y no solo en el campeonato, en Europa también ha trasladado su solidez, estando todavía invicto en la máxima competición internacional y con muchas posibilidades de acceder a la final de Londres.
Meritazo para un equipo que ha funcionado a la perfección, con el nuevo estilo del rombo en el centro del campo y dejar en los costados de ataque a los brasileños, y aprovechar la inspiración goleadora de Bellingham y el desborde y la superioridad de Vinicius, al que le costó arrancar, pero que ahora está terminando el año como una moto en el tramo más importante. De no haber caído en el Metropolitano, estaríamos hablando de una liga invicta, lo que son palabras mayores para un equipo que espera culminar el doblete en unas semanas que convertirían esta en una temporada histórica.