Tras varias semanas de competición ya sabemos quienes jugarán la gran final, y se tratan de la Portugal de Cristiano Ronaldo ante la anfitriona Francia de Griezmann. Las dos han hecho un fútbol irregular a lo largo del torneo pero tras las semifinales se han llenado de confianza. Portugal jugó muy seria ante Gales, con la importante baja de Pepe supo mantener la portería a cero y fue contundente arriba, algo de lo que ha adolecido durante todo el torneo. Por su parte Francia supo sufrir enormemente ante Alemania para pasar unas durísimas semis que se resolvieron por el estado de gracia de un Griezmann al que no olvidemos Deschamps sentó en el segundo partido del torneo. Se ha convertido en la bota de oro del torneo y llega enrachado tras marcar en los últimos tres partidos.
Visto los onces Francia es muy superior a Portugal, su banquillo además es el más profundo casi del torneo y eso que cuenta con bajas de hombres tan importantes como Benzema o Varane, pero la mística de esta selección cuando alberga torneo futbolístico la hacen muy peligrosa y pueden provocar la tercera corona en casa tras la del 84 y el mundial del 98. Por su parte Portugal ya sabe lo que es quedarse a las puerta del título, curiosamente en su Eurocopa en el 2004, sólo Cristiano y Carvalho repiten de aquella plantilla, y son sabedores de la oportunidad que se les ha vuelto a brindar.
El partido tiene pinta de que va a ser malo, con poco fútbol y los dos equipos a la espera de que se cometa un error para aprovecharse. Se espera que Francia intente llevar un poco más el timón del juego y que Portugal limite sus ataque a transiciones rápidas con Nani y Cristiano arriba. Será la primera vez que los aficionados culés vean a su flamante nuevo central Umtiti frente al archienemigo público número uno, y Griezmann tratará de superar a Pepe para marcar al igual que lo intentó en Milán en la final de la Champions (donde de haber anotado el penalti y llevarse esta Eurocopa quizás sería el máximo candidato al balón de oro). Lo dicho partidazo en el que veo ligeramente superior a Francia.