Partidazo el que se vivió ayer en el Santiago Bernabéu entre Madrid y Valencia. Los dos equipos lo dieron todo y acabaron llevándose un punto pero pudiendo ambos haberse llevado los tres puntos perfectamente. El Valencia volvió a ser un equipo sólido y ordenado por primera ve en mucho tiempo y pudo salir incluso con un botín mayor del estadio del líder, tras ponerse 1-2 a falta de tan sólo quince minutos para la conclusión. Marcelino alineó a los dos nuevos fichajes del equipo y la jugada le salió a la perfección, sobre todo en el caso de Kondogbia que corroboró su partidazo con un gran gol llegando desde la segunda línea.
En el Madrid se le escaparon dos puntos en parte gracias a los fallos inverosímiles de un Benzema que acabó con el partido con algunos pitos. Tuvo hasta tres claras ocasiones mas un palo que pudieron cambiar el final del partido, pero no fue su noche y desperdició de manera increíble todas. Otro que tampoco tuvo su día y acabó más pitado que el propio Benzema fue un Gareth Bale que cada día desentona más en el equipo y cuya aportación cada vez es menor en el juego y todo apunta a que en cuanto Cristiano finalice su sanción deberá ser relegado al banquillo en favor de un Asensio en estado de gracia.
Y por supuesto el nombre propio de la noche, Marco Asensio, que anotó dos golazos y se echó a todo el Real Madrid en la espalda para estar a punto de culminar otra remontada express para los blancos. Parece ya todo un veterano por las decisiones que toma y con el cambio de Isco en el banquillo llevó todo el peligro del equipo en ataque. Fue un dolor de cabeza para toda la zaga che y acabó anotando un doblete. Ahora mismo es quizás el jugador del Real Madrid más en forma y ya ha derribado la puerta de la titularidad en el equipo, creando un serio problema para Zidane que tendrá que ingeniárselas para tener a todos contentos y con minutos.